26 enero 2021 Gestión empresarial
En primer lugar me gustaría aclarar y ampliar las funciones del Interim Management, evolucionándolo del clásico concepto de “alquiler de directivos” como sustitución o “parche” de una situación concreta (baja de personal habitualmente), hacia su valor real que es la aportación de “expertise” para afrontar situaciones especiales en las empresas y buscar esa real aportación de valor que puede proporcionar el Interim Manager, tomando como base sus experiencias y conocimiento adquiridos a lo largo de una exitosa carrera profesional.
Las empresas se enfrentan con cierta frecuencia a esas situaciones especiales que, por falta de conocimiento interno o porque el día a día no lo permite, no pueden afrontar con su propia estructura. Estas circunstancias son múltiples: entradas en nuevos mercados o sectores, proyectos específicos de crecimiento, lanzamiento de nuevos productos, cambios de modelo productivo, coaching operativo de personal promocionado…. y muchos más casos largos de enumerar.
Es en ese momento cuando deben buscar apoyo externo en profesionales especializados que puedan trabajar desde una visión externa y objetiva, con exitosas experiencias asimilables, logrando obtener buenos resultados en plazos más breves de lo que usualmente se haría y con más garantía. Es el momento de contratar a un Interim Manager.
Además hay un factor nada despreciable, y es que supone un COSTE VARIABLE: una vez que la situación se ha solucionado, finalizado u orientado en la estructura habitual de la empresa, el Interim Manager finaliza su misión y el coste desaparece.
El contratar un Interim Manager NO es una cuestión de tamaño de la empresa: cualquier PYME puede hacerlo. Lo que sí es fundamental es definir el objeto de la MISIÓN y el seleccionar correctamente cuál es el profesional más adecuado para la misma. Aquí se hace necesaria la figura de los Service Provider, o empresas que disponen de amplias bases de datos de profesionales expertos y que, por lo tanto, pueden realizar una búsqueda orientada y profesional, que permita la selección del Interim Manager adecuado a la misión.
En resumen yo diría que el Interim Management está dando unos primeros pasos en España (mucho más desarrollado en los países sajones), pero que en el conglomerado empresarial de nuestro país, muy poblado de PYMES, es una herramienta con un futuro muy prometedor y que puede ser de gran utilidad para estas empresas en su evolución y desarrollo.
Ahora que conoces mejor los beneficios de la figura del Interim Management para las empresas. ¿Crees que tendrá futuro en nuestro País?
Antonio Muñoz